Expresión escrita

Creo que si hay una cosa complicada para muchas personas es escribir una carta formal. El momento de plantarte frente a un papel / correo electrónico en blanco y decir ¿cómo empiezo?. A ver “Estimada señora…” ¿pero lo sigo del nombre o del apellido? ¿será el trato lo suficientemente formal? ¿será excesivamente formal? ¿y si pongo simplemente hola?. Es aún muchos más difícil cuando los destinatarios son más de uno: “Estimados señores…” “Estimadas señoras…”. Bueno, pues hoy he descubierto que en Cuba es mucho más fácil que todo eso, gracias al socialismo y a que no hay clases y a que todos somos iguales y tal… Así es como empieza una carta formal en este país:

Transcribo para el que no lo entienda:
A: Directora Municipal
de la Vivienda- Playa

COMPAÑERA:

No me negaréis que es mucho mejor.

Y enlazado con esto, os pongo una serie de refranes que los cubanos, haciendo uso del humor irónico que les caracteriza, han adaptado a la situación que se vive en su país. A la izquierda el original y a la derecha el “cubanizado”, a mí me hicieron mucha gracia:

Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente / Camarón que se duerme, se lo comen los turistas

Árbol que nace torcido, jamás su tronco endereza / Árbol que nace torcido, para el consumo nacional

Dios le da barba al que no tiene quijada / Dios le da barba al que no tiene cerebro (y ya sabéis por quién va esto)

Cuando el río suena, es porque piedras trae (este no tiene versión doble, pero me hizo mucha gracia)

Y para finalizar, un refrán que me gusta y que resume muy acertadamente, desde mi humilde punto de vista, la idiosincrasia del pueblo cubano:

Si tu mal no tiene cura, ¿por qué te apuras? Y si tiene cura ¿por qué te apuras?